Capítulo 2: ¿Por qué reflexionar sobre el concepto?

Existe confusión o mal uso en ciertos conceptos, por lo que debemos de reflexionar y aclarar conceptos fundamentales, como lo es para la pedagogía, del cual el concepto central es la "Educación". ¿Por qué reflexionar sobre este concepto? El concepto educación nos puede permitir progresar y reflexionar acciones educativas más coherentes. A partir de nuestros planteamientos ideológicos podemos llegar a un planteamiento pedagógico.

• Para alcanzar coherencia pedagógica

Quizá una de las más frecuentes debilidades del trabajo pedagógico es la incoherencia interna y externa. La incoherencia interna se refiere a la falta de unidad, relación o derivabilidad que existe en sus postulados más generales. En la definición del concepto educación; se postulan fines y objetivos que no se basan en dicha definición y se plantean y desarrollan organizaciones curriculares, metodologías y acciones propiamente didácticas que se van alejando cada vez más de ese postulado general.

La incoherencia externa se manifiesta en las concepciones diferentes que el pedagogo tiene de la sociedad, de las relaciones humanas, del mundo que pretende construir, con las definiciones de educación, currículum, metodología educativa y otros conceptos que ese mismo pedagogo maneja. Para alcanzar la coherencia pedagógica (interna y externa) es necesario tener muy claro lo que entendemos por educación; lo que queremos que llegue a ser y cómo alcanzarlo. La coherencia, entonces, aunque es interna o externa es una relación integradora de lo que se piensa, anhela y hace. Tener claro lo que entendemos y queremos desarrollar como "educación" es una manera de ir alcanzando esas múltiples coherencias.

• Para transformar la educación

No sólo la vida y las condiciones materiales tienen que cambiar; la educación también está obligada a transformarse. En primer lugar dejar de tratar de entender qué entendemos por educación. ¿Cómo cambiar algo que tenemos muy claro qué es? La actitud pasiva frente al concepto denota falta de interés y apatía por vivir el concepto. Esta indiferencia es una señal muy clara de estar "trabajando en educación", pero sin ninguna intención por cambiar o transformar. La posición indiferente frente al concepto es, por tanto, una de las maneras teóricas más firmes para impedir la transformación de la educación, pues en otras palabras, quien no devela la educación no puede y tampoco quiere transformarla.

¿Cómo aplicarlo en la vida?

Actualmente existen docentes que no comprenden o no reflexionan el concepto de educación. Si como maestro no entendemos qué es educar, qué es lo que le vamos a enseñar a nuestros estudiantes.  Educación es la manera de progresar; uno como maestro, debe de buscar la manera de mejorar el planteamiento pedagógico y causar en los estudiantes una gran enseñanza en su proceso de aprendizaje. Para evitar la incoherencia interna como externa debemos de tener claro cuáles son nuestros objetivos.